Ya sé que llevo desaparecida del blog un montón de meses. No me da la vida para todo. Aunque sigo colgando recetas en Instagram y en Facebook, escribir en el blog es algo que me cuesta mucho más. Prefiero hacer entradas más completas y para eso necesito tiempo. Pero he decidido que a partir de ahora intentaré escribir una vez a la semana. Recetas, alimentos sanos, recomendaciones para una vida sana, mis descubrimientos healthy... En fin, posts que espero que os sean muy útiles. A mi también me sirven como recordatorio de mis platos favoritos.
Como éste artículo sobre la kale y recetas para hacer con kale. Hace un par de años la kale (o col rizada) se puso de moda, pero aquí era imposible encontrarlo por ningún lado. Pero ya no. He comprado kale en BM, en LIDL, y en ALDI. Cuesta aproximadamente un euro el manojo de kale. Así que está bastante bien de precio, y yo os animo a que lo probéis.
La kale tiene un sabor un poco fuerte y siempre cuesta empezar a cocinar con ingredientes nuevos, pero está lleno de propiedades de lo más saludables que hacen que merezca la pena incorporarlo a nuestra dieta. Solo se trata de acostumbrarse a este ingrediente y sacarle todo el partido.
Kale en ensalada: cómo masajear la col kale
La kale se puede comer cruda, pero es un poco duro y fibroso, así que conviene "masajearlo" antes de consumirlo para que se ablande. Hay que quitar el tallo central y las fibras más duras y poner nuestros deditos a trabajar. Basta mezclarlo con el aliño que vayamos a utilizar y masajear las hojas durante dos o tres minutos. Si lo dejamos reposar una media hora en la nevera, se potenciará el efecto.
Ensalada de kale con champiñones a plancha y garbanzos, con aliño de tahini, salsa de soja, vinagre de manzana, aceite, un poco de agua y cúrcuma. Esta ensalada templada tiene un sabor exótico, y resulta un plato súper completo, con proteína y vegetales. El aliño es una mezcla muy rica que le da un sabor muy especial, pero siempre se puede hacer una clásica vinagreta.
Ensalada de kale aliñada con aguacate machacado y limón. En lugar de poner el aguacate en trozos grandes, se puede triturar con un tenedor para que se mezcle mejor con el kale y el limón. Si además le añadimos tomates cherry tenemos una ensalada fresca y fácil de hacer.
Ensalada de kale con manzana, zanahorias, pasas y nueces, con aliño de anacardos, limón, curry, agua, sal y miel. Una ensalada que queda con un toque crujiente muy fresco. Para hacer el aliño hay que dejar los anacardos en remojo media hora y después triturar los ingredientes con una batidora.
Kale en smoothie
La col kale es ideal para utilizarla en nuestros smoothies o zumos verdes. En lugar de espinacas, podemos echar unas hojas de kale y mezclarlo con frutas, leche vegetal, etc.
Smoothie con kale, plátano y frutos del bosque. Este smoothie es uno de los que más me tomo, gracias al plátano queda muy dulce. Lo suelo preparar con leche vegetal y además añado semillas de chía.
Smoothie de kale con piña y jengibre. Con una base de agua o agua de coco, queda un zumo verde de lo más refrescante, super depurativo para el organismo.
Smoothie de kale con kiwi y crema de cacahuete (o crema de anacardos). Otra mezcla que funciona bien, además la crema de cacahuete (o de otro fruto seco) le da más energía y un poco de dulzor al sabor.
Kale con legumbres
La kale se puede utilizar también en potajes con legumbres, cocida durante unos quince minutos, así que se puede añadir al final cuando estemos cociendo el potaje. Por ejemplo, en unas lentejas estofadas con kale y champiñones.
Kale en sopa
La siguiente receta que tengo en mi lista para probar es esta sopa vegana de kale (lleva además patatas, puerro zanahorias, apio y caldo vegetal).
Kale chips
Aún no he probado a hacerla en el horno, pero también se pueden hacer chips de kale para tener un snack mucho más sano que las patatas fritas.
Ya veis que hay muchas maneras de comer kale, ahora solo queda que os animéis a probarla y que experimentéis un poco con ella.
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