Más beicon, menos running, un libro que cambia la perspectiva sobre cómo adelgazar

Hoy en día hay dietas para todos los gustos: bajas en grasas, altas en proteínas, basadas en la fruta y las verduras, basadas en el pescado. Casi casi te la puedes hacer tú a medida según tus gustos. Además unas se contradicen con otras, lo que está prohibidísimo en una es super recomendable en otra y al revés. Así que no hay quién se aclare a la hora de buscar un plan de adelgazamiento. El nuevo libro de Grant Petersen Más beicon, menos running parte de una premisa bastante revolucionaria: subir grasas, bajas hidratos de carbono y cambiar los entrenamientos aeróbicos (como correr) por otros de fuerza. Y así adelgazas sin sufrir, sin pasar hambre y casi sin darte cuenta.

El libro te explica de manera muy sencilla cómo entrar en cetosis, un proceso del cuerpo por el que el cuerpo adelgaza sin pasar hambre reduciendo el consumo de hidratos de carbono, con una dieta moderada en proteínas y sobre todo, alta en grasas. Que puedas comer el bacón, la mantequilla, los aguacates, los huevos y los quesos más grasos en una dieta adelgazante me parece la leche. Pero la cetosis tiene sus ventajas e inconvenientes. 

Contrariamente a lo que puede parecer, no es una dieta que eleve el colesterol, pero no me parece una dieta manejable a largo plazo. Creo que es una solución bastante radical, apta para personas que lo han probado todo y no consiguen adelgazar. Con esta dieta sí pueden llegar a perder muchos kilos y a salir de un círculo vicioso del que no consiguen escapar con otras dietas. Pero yo me siento más a gusto comiendo fruta, verdura, legumbres, cereales integrales y sin olvidar las proteínas magras y las grasas buenas como las del pescado azul, los aguacates, el aceite de oliva y los frutos secos. Todo con moderación.

Sí que me quedo con algunos de los consejos y recomendaciones que da:

• Hay que controlar los niveles de insulina en la sangre, evitando los alimentos con alto índice glucémico como los azúcares, las harinas refinadas, la pasta y el arroz blancos.
• Algunos productos que se suelen tomar en las dietas de adelgazamiento son lo peor: tortitas de arroz (y reconozco que una época las tomé), los productos light, las barritas energéticas, los zumos de frutas...
• Las grasas no son tan malas como nos las han ido pintando durante décadas anteriores, hay que consumirlas, porque además nos ayudan a adelgazar.
• El coco es un alimento fantástico. El coco rallado es genial para comer acompañado de fruta y de avena, y desde que aprendí a usar la leche de coco para hacer curry, es una de mis recetas favoritas.

• Entrenar con pesas te ayuda a adelgazar. Las mujeres somos muy reacias a usarlas por miedo a ponernos musculosas, pero los entrenamientos de fuerza, con tu propio peso o con pesas ligeras, hacen que con 15-20 minutos de entrenamiento al día adelgaces más que yendo todos los días a andar una hora.
• Hay alimentos que nos hacen estar hambrientos al poco tiempo de comerlos, como los cereales integrales de caja, mientras que comiendo unos aguacates rellenos de huevo como los que abren el post no tengas ganas de comer durante horas. Y las calorías ingeridas no son mayores.
• Mejor comer los huevos completos que sólo las claras ¡por fin!

Así que el libro es bastante interesante de leer (siempre se aprenden cosas) y pienso probar alguna de las recetas que vienen, pero para ponerlo en práctica a rajatabla tienes que estar muy seguro de que es un cambio en tu estilo de vida que te interesa y que podrías sostener en el tiempo, porque encaja con tu modo de pensar y porque crees que son cambios que te favorecen y le vienen bien a tu cuerpo. No hay dos personas iguales y las dietas deben estar adaptadas a tus necesidades, a lo que te sienta bien y mal y ser compatibles con tus hábitos de vida. El libro está a la venta en Amazon por 15,68 euros.

Síguenos: Facebook | Instagram | Bloglovin | Pinterest